La sostenibilidad hoy en día no es negociable; satisfacer las necesidades actuales sin comprometer las generaciones futuras es un requisito para cualquier sector: económico, social, agricultor, de movilidad, entre otros. 

Partiendo de la premisa de que la construcción es la responsable de alrededor del 40% del CO2 que se emite a la atmósfera de forma global, es claro que más que una tendencia, la construcción sostenible es el único camino que tiene la industria; por eso hablar de desarrollo equivale a pensar en sostenibilidad. 

Esta sostenibilidad en proyectos inmobiliarios se traduce en pensar, diseñar y construir proyectos de alto desempeño para mitigar el cambio climático, garantizar el bienestar de las comunidades: presentes y futuras, y velar por el cuidado del medio ambiente.   

Tendencias en diseño sostenibles para proyectos inmobiliarios

Cada vez son más las personas conscientes de adoptar hábitos de consumo saludables para el medio ambiente, esto no solo hace referencia a la alimentación o al uso de ciertos productos, sino también a los espacios que habitamos. 

  1. Tendencia Biofílica: Es una tendencia ecológica que consiste en incluir naturaleza, ya sea en la fachada o al interior en muros y paredes. El término biofilia significa “amor hacia lo vivo” y fue creado con el fin de explicar que el contacto con la naturaleza es vital para el desarrollo humano.

Según Alejandro Fonseca, director de Sostenibilidad de AEI, “varios estudios han demostrado que las personas que trabajan en espacios sostenibles, adquieren niveles de competitividad laboral muy altos. Esto debido a que los entornos crean un estado mental de confort, que se convierte en salud y bienestar para los empleados”

Eficiencia energética: Pensar en edificaciones con fachadas de vidrio, más que una tendencia en diseño, es el camino para generar un impacto importante en el ahorro de energía. El vidrio genera transparencia y permite que la luz natural del día penetre aun más el interior de los espacios ya sean residenciales o comerciales.

Conservación del agua: Las fachadas que recogen agua son cada vez más, con una intención detrás del diseño; estas construcciones están pensadas en el ahorro del agua, tratando de disminuir su consumo y aprovechándolo cuando se obtiene de forma natural. 

Este tipo de edificaciones, suelen utilizar un 25% menos de agua que un edificio convencional, pues recolectan el agua lluvia y la reciclan para diferentes fines: irrigación de jardines o sistemas sanitarios. 

Definitivamente “el futuro es hoy”, nuestra sociedad está atravesando cambios importantes que se traducen en conservación, como sociedad estamos tomando consciencia y acciones que nos llevarán a tener un mundo mejor. 

Para orgullo nuestro, “según el último estudio World Green Building Trends, realizado por la firma Dodge Data y Analytics, Colombia está entre los tres países que más promueve la construcción de proyectos inmobiliarios sostenibles en Suramérica