LOS BEBES UN REGALO PRECIADO, NUESTRO DEBER PROTEGERLOS EN TODO MOMENTO

Abad Faciolince Inmobiliaria, la seguridad es una prioridad

Los niños son los seres más queridos y por ende los más protegidos en nuestras familias, no obstante ninguna casa o apartamento está libre de riesgos para los pequeños, estas cuentan con diferentes lugares potencialmente peligrosos como las cocinas, los baños, las ventanas y los balcones. En consecuencia las familias de hoy dan una prioridad importante a la seguridad de los bebes en sus casas.

abad faciolince inmobiliaria

Por esta razón Abad Faciolince inmobiliaria te trae las siguientes recomendaciones para proteger a nuestros bebés. Uno de los lugares más propensos a los accidentes domésticos es la cocina, no obstante para los niños el peligro aumenta considerablemente. Recordemos que los bebes son unos exploradores y su mundo es la casa, esta faceta de reconocimiento es de bastante cuidado pues los chiquitos quieren ver, oler, tocar, escuchar y saborear; por lo anterior es importante asegurar y no dejar al alcance de los bebes utensilios peligrosos como los cuchillos, electrodomésticos, despensas e implementos de aseo, así mismo es primordial asegurar las tomas de energía con protectores y mantener la llave del gas cerrada.

abad faciolince inmobiliaria

Por otra parte los baños y los balcones representan otros focos de peligro en nuestras casas. Es recomendable tener tapetes antideslizantes dentro y fuera de la bañera, cuando bañes a tu bebé recuerda asegurarte de que el agua este tibia y no caliente, llena la bañera entre 2 y 3 pulgadas e instala seguros a prueba de niños para los inodoros. En los balcones es importante tener una altura muy superior a la de los niños y además instalar barras de seguridad, en las ventanas y puertas de cristal es recomendable poner adhesivos que permitan identificar la profundidad.

abad faciolince inmobiliaria

Seguir estas recomendaciones minimizará los riesgos de los chiquitos, sin embargo lo más importante para prevenir accidentes es nunca dejarlos solos y tenerlos siempre a la vista.